Misericordia, la fuerza que todo lo vence

El fin de semana del 7 y 8 de mayo pasados se reunieron en asamblea miembros de la Pastoral Nacional de Adicciones y Drogadependencia, en la Casa de Retiros “Domingo Savio” de Ramos Mejía (Bs. As.). Asistieron los delegados de las diócesis de las distintas regiones pastorales de nuestro país: NOA, NEA, Litoral, Bonaerense, Platense (en ésta nos encontramos nosotros), Centro, Cuyo y Patagonia. El obispo asesor de la Pastoral, Mons. Fernando Maletti, estuvo presente durante los dos días.

Se formaron comisiones de intercambio de experiencias, cada una con su particularidad local y territorial. Esto dio cuentas de un mosaico de realidades diversas con un punto en común: organizarse para dar respuesta al flagelo de las drogas. Se reflexionó teniendo como el marco lo que nos propone el Papa Francisco, especialmente en el año del Jubileo de la Misericordia, de ser una “Iglesia que actúe como hospital de campaña que sale al encuentro para curar las heridas”. Los equipos de trabajo se centraron en caminar hacia una imagen de parroquia preventiva y de brazos y puertas abiertas, armándose para correr las fronteras pastorales, ante la orfandad de vínculos.

Además, el encuentro contó con la participación de del Secretario de Presidencia de la SEDRONAR, Mg. Roberto Moro., que fue invitado a disertar.

Se vivió en clima de alegría fraterna y celebración, signado por la Solemnidad de la Ascensión del Señor, en la que resonaron con toda su fuerza las palabras del Libro de los Hechos de los Apóstoles «Hombres de Galilea, ¿por qué siguen mirando al cielo?»… (1,11).