El sacerdote, un “sanador herido”.
(Coronel Pringles) En la misa celebra en memoria de San Juan María Vianey, patrono de los párrocos y de los sacerdotes, esto último instituido por Benedicto XVI; el P. Pedro Fournou señaló que “el sacerdote está llamado a curar heridas, aunque él mismo está herido y está llamado a renovar siempre la alianza que Dios hizo con su pueblo”.
Agradeciendo las oraciones y el afecto demostrado por el Día del Párroco, en su homilía de este martes 4 de agosto el P. Pedro hizo referencia al capítulo 5 de la carta a los Hebreos en la que habla del nuevo sacerdocio en Cristo, expresando que “todo sacerdote es tomado, expropiado, de entre los hombres y puesto para intervenir en favor de su pueblo en todo aquello que se refiere a Dios a fin de ofrecer dones y sacrificios por los pecados” donde “el sacerdote puede y debe mostrarse indulgente con los descarriados porque el mismo está sujeto a la debilidad humana, por eso debe ofrecer sacrificios, no solamente por los pecados del pueblo, sino también por su propios pecados”, resaltó el P. Pedro Fournau, párroco de Santa Rosa de Lima de Coronel Pringles.
En esta misma línea dijo que “el sacerdote es un sanador herido llamado a curar heridas, pero que al mismo tiempo está sujeto a la herida del pecado en su carne”. El sacerdote “puede y debe aplicar misericordia siendo indulgente porque primero ha experimentado en carne propia la indulgencia, la paciencia y la misericordia de Dios en sus propios pecados”, aseguró el P. Pedro.
Asimismo expresó que “el sacerdote no es sacado de los hombres para vivir distinto al resto de los hombres, es uno más de entre los hombres tomado por Dios para ser puesto a un bien mayor” y es “ungido por Dios y vuelto a los hombres para servir a todos los hombres en las cosas de Dios curando las heridas nuestras y las de los demás a través de los sacramentos y de la palabra”.
El P. Pedro concluyó su homilía recordando el martirio de “un gran sacerdote de Argentina que, en forma cruenta, oscura, un 4 de agosto de 1976, era violentamente asesinado: el obispo de La Rioja: Mons. Enrique Angelelli”; que “derramando su sangre como Jesús, para ser testigo de la verdad y de la vida; y desde abril del año pasado, junto con otros tres amigos un laico y dos sacerdotes, son venerados como mártires. Pidamos a Mons. Angelelli que interceda por nuestro pueblo y que nos regale siempre el coraje y la audacia para anunciar el evangelio aun cuando eso nos cueste, pagando al contado como hizo el o en cuotas cotidianas como hacemos nosotros, la vida entera”.
Mensajes de los niños por el Día del Párroco.
Desde la catequesis de las distintas comunidades de la Parroquia Santa Rosa de Lima, se invitó a los niños a que enviaran carteles o afiches destacando alguna característica que más le gustara del P. Pedro. La respuesta por parte de los chicos de catequesis fue muy creativa y muy linda. Con el material enviado se armó un bonito mural dentro del templo que fue una sorpresa para el P. Pedro, quien destacó la idea y el cariño reflejado en los mensajes y carteles.